Andrea Pagés
Imagínate una mañana soleada, con la luz entrando por las ventanas y bañando todo el departamento con un brillo cálido. Andrea está ahí, luciendo espectacular. Su piel refleja la luz de una manera que la hace ver casi etérea. Su mirada es intensa pero a la vez relajada, como si estuviera completamente en su elemento. Además, su estilo es impecable, con una elegancia natural que hace que todo parezca fácil. Es una de esas personas que tiene una presencia magnética, de esas que no puedes dejar de mirar.